Carlos Iván Landa Kerschbaumer
El presidente del congreso actual José Williams Zapata, termina su periodo como cabeza del legislativo el próximo 26 de julio de 2023, fecha en que deberá instalarse una nueva mesa política en el parlamento nacional, cuya primera actividad será analizar el mensaje presidencial de la mandataria Dina Boluarte Zegarra, que acudirá con su gabinete para dar a conocer su proyección.
A 16 días, de conocerse la nueva conformación de la mesa directiva del congreso, continúan las especulaciones, respecto a “Perú Libre” con apenas 15 legisladores propios, y en la búsqueda de aliarse con personajes de otras bancadas pero de la misma línea ideológica, que haga posible una comunión de ideas que establezca un consolidado político apuntando a una sola y clara dirección.
La ilusión del manejo totalitario desde la mesa directiva de “Perú Libre” pareciera ser un viejo anhelo de estos congresistas, que comenzaron con 47 y se partieron hasta quedarse con 15, en razón de la falta de armonía entre sus miembros y a las pretensiones personales de algunos, que protestan cuando las cúpulas cierran el paso a los demás y no los dejan participar en comisiones.
La familia Cerrón en discrepancia con su vocero, es más bien de jugar a diversas opciones, la primera alcanzar la presidencia del congreso, de no lograrlo ser parte de la mesa directiva, pero manteniendo su posición política, esto sin embargo no había quedado claro entre los congresistas que desean postular, que creían que ser parte de la mesa los reducía a acatar también las ideas.
En razón a un gesto democrático , al congresista Cavero Alva de Avanza País, le pareció sensato la participación de Waldemar Cerrón en la mesa directiva, el fujimorismo fue más claro, la izquierda no debe presidir la mesa directiva del congreso, quizá tampoco acepten que se le otorgue la primera vicepresidencia, de cualquier forma podrán participar de un colectivo político variopinto.
De esta manera, está muy claro que no habrá componendas entre los miembros de la mesa, cada cual defenderá su posición política desde sus curules y dirigirán el debate desde la mesa, el que quiera manifestarse, lo hará desde el llano, cuando no tenga nada que plantear, participará de la mesa, tratando de ser lo más reglamentarita posible, cumpliendo por ende la labor administrativa.
Otro aspecto que debe explicarse, es que a partir de las elecciones parlamentarias se viene una reestructuración de las comisiones, conservándose la cuota de poder de cada bancada y aplicándose la rotación política en cada caso, es probable que los voceros no sean los mismos y que la composición de las comisiones varíen sustantivamente para dar paso a demás miembros.
Es probable que algunos grupos políticos mantengan las cabezas de los congresistas que han tenido éxito en sus comisiones, o releven a quienes no han cumplido bien sus cometidos, hay que tener en cuenta que es el tercer proceso eleccionario que se produce y que en algunos casos no todos han cumplido sus mandatos por efectos de deserciones o sanciones de algunos integrantes.