Carlos Iván Landa Kerschbaumer
Ante el desgaste político del gobierno de Pedro Castillo y por ende luego de que el mandatario haya descartado la ideología de “Perú Libre” por una postura de centro izquierda, muy alejada de la posición patrocinada por el líder de la organización, Vladimir Cerrón, con una actitud mesurada, incumpliendo planteamientos partidarios, la dirigencia ha preferido fijar una posición concluyente.
En ese objetivo, la exigencia de la organización conmina al presidente de la república a renunciar irrevocablemente a su militancia, por haber vulnerado dos artículos del estatuto partidario: 1) no cumplir con los acuerdos políticos y 2) generar la división de la bancada, partiéndola en cuatro partes, suficiente para que el mandatario se aparte del partido político que le permitió la victoria.
En ese contexto, “Perú Libre” ve como un riesgo participar en las próximas elecciones cargando una mochila pesada, que significa arrastrar las denuncias e investigaciones que realiza el Ministerio Público al gobierno de Pedro Castillo Terrones, por lo cual desea colocarse fuera de esa situación que no desea arrastrar el partido de Cerrón Rojas, guardando una estratégica distancia.
A diferencia de la ministra de Desarrollo e Inclusión Social Dina Boluarte a quien el comité político la echó de “Perú Libre” por supuesta felonía y alejarse de los planteamientos partidarios, en el caso de Castillo Terrones, la dirigencia con participación de las bases han preferido informarle la decisión, para conocimiento, antes de realizarle un proceso administrativo, señala su argumento.
Empero, la posición del partido político que dejó de ser oficialista, sería seguir apoyando a Pedro Castillo Terrones, aun renunciando a sus filas, para no hacerle juego a la derecha, según afirma la militante Margot Palacios, tomando decisiones positivas en temas de la agenda política partidaria y rechazando a las que van en sentido contrario; la oposición cree que es una “cortina de humo”
Lo cierto es que la izquierda puede estar dispersada en cuatro bancadas o más, pero tiene claro el panorama, que lo suyo es la unidad en casos de que su posición corra riesgos; sus planteamientos, tendrían incluso respaldo de los caviares que se alejaron del gobierno, pero defienden a muerte su pregón, de no ceder ante ideologías distintas a las suyas, que les permitieron alcanzar sus escaños.
Para algunos la extraña decisión de pedirle al presidente Pedro Castillo Terrones de alejarse de “Perú Libre” busca la reacción del mandatario, en busca de negociar y que el partido vuelva a tener cuadros en el gabinete, los seguidores de Vladimir Cerrón, tienen como reto alcanzar la mayoría de gobiernos regionales y gobiernos locales posibles para empezar a crecer políticamente.
Como sabemos la ex organización política conocida en el pasado como “Perú Libertario” y que luego cambió de nombre por “Perú Libre” fue un partido muy pequeño, que solo fue creado en primera instancia para participar electoralmente en la región Junín, siendo la actual, la primera oportunidad que llegó al poder, a través de un trabajo político sostenido que convenció al pueblo.